Concibo el mundo del arte como una gran fiesta en la que el artista debe interactuar con otros agentes allí presentes, a saber, el público, el mercado, el crítico, la galería, el coleccionista, el museo, etc. Busco subvertir, activar los aspectos del metalenguaje de este ámbito que más llaman mi atención, como son los juegos de relaciones de poder o dominación existentes, las fatalidades que tienen los intentos de seducción por parte del artista hacia el público o las posibilidades que ofrece la distribución de las obras en el espacio expositivo.